A través de un live de Instagram, Rubén Gutiérrez, ex participante de Gran Hermano, hizo un llamado a los canales de televisión, comentando que está dispuesto a contar su versión de los hechos, luego de ser expulsado del reality, tras ser acusado por Scarlette Gálvez de tocarla sin su consentimiento.
En el video, comento que aún se encuentra con depresión luego de su expulsión del encierro.
“Pasaba empastillado y querían que fuera al panel. En esas circunstancias no podía hablar”, reveló.
El tiempo siguió pasando hasta que llegó el 3 de diciembre, y según lo que le dijeron en CHV, ya no le dieron chance de dar su versión, porque Gran Hermano se acababa.
«Me quitaron la oportunidad de defenderme y todavía me mantienen callado. Yo tengo el derecho de defenderme. Me quitaron el derecho como persona. Si hay algún canal que se quiera acercar a mí, porque quiero contar todo con detalles. Sí, quiero hablar”, dijo mientras transmitía el video en vivo.
Además, explicó que «no puedo hablar mucho. Todavía me tienen amarrado» poniendo en contexto la cláusula con que tiene con CHV, que tiene duración hasta el 3 de mayo.
Familia involucrada: Rubén asegura que ha recibido amenazas luego de su salida de Gran hermano
Según contó el ex chico reality, la denuncia también perjudicó a su entorno cercano: «Mi familia sufrió mucho, ha sido una pena horrible. Mis hermanas tuvieron que congelar sus estudios por amenazas. Siempre fui caballero. Tengo contrato hasta el 3 de mayo. Sufrí discriminación, fueron muy cruel conmigo».
Asimismo, explicó que: «No puedo hablar mucho porque todavía estoy amarrado. Ellos no tomaron la decisión, no estoy en ningún proceso judicial de parte de ellos. Pueden revisar mis antecedentes, no tengo nada».
Para concluir, Gutiérrez dice que está «dispuesto a hablar, porque este proceso es muy complejo. Quiero cerrar este capítulo este mes, destruyeron mi familia. Mi hermano chico tuvo que dejar de estudiar por amenazas».