A semanas de que Paulina de Allende-Salazar interpusiera una demanda contra Mega, la señal privada no se quedó de brazos cruzados y arremetió contra la periodista.
Recordemos que según pudo constatar el Diario Financiero, la acción legal de la comunicadora llegaba a un total de 91 páginas. Esta fue escrita por el abogado Joaquín Cabrera y se alojó en el 1° Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago.
En ese texto, Paulina de Allende-Salazar solicitó varias cosas, entre ellas, un disculpa pública en el matinal Mucho Gusto y una suma de dinero que se acercaba a los $421 millones.
La respuesta de Mega tras la importante demanda de Paulina de Allende-Salazar
Desde Megamedia contestaron a la acción legal de la periodista con un inédito antecedente de un presunto «maltrato laboral».
«El informe de la investigación por acoso laboral concluyó que la forma de comunicar instrucciones y supervisión por parte de la periodista genera menoscabo, humillación e inseguridad profesional, y más aún cuando no cumplen sus expectativas», señala el texto al que tuvo acceso Glamorama.
Asimismo, desde Megamedia también manifestaron que había una actitud de superioridad por parte de Paulina de Allende-Salazar. Esto en el contexto de la interacción con otras personas en el ámbito profesional.
Sin embargo, la cosa no se quedó en la acusación anterior. También afirmaron que existen antecedentes sobre «conductas inaceptables para el empleador».
«Se le advirtió a la demandante que no se tolerarían este tipo de conductas», aseguraron desde Megamedia. Además, igualmente dijeron: «estas infracciones contractuales futuras podían ser sancionadas con la extinción del contrato de trabajo», añadieron.
En el caso de la parte contraria, el abogado Joaquín Cabrera respondió a estas palabras contra Paulina de Allende-Salazar.
«Esa acusación no es veraz ni está ratificada por ninguna autoridad laboral competente. Además, está lejos de los fundamentos planteados por Mega en la carta de despido», contestó, según lo informado por La Cuarta.
«No quiero pensar que es un nuevo intento por denostar y amedrentar a una profesional de excelencia que solo está ejerciendo su derecho; el mismo que todo trabajador debiera poder reclamar sin represalias y amenazas encubiertas», agregó el representante legal de la periodista.