Las temáticas sobre el sexo se hacen más relevantes que nunca conversarlas, es por eso que en la antesala de un nuevo «Martes Hot» del Show de la Tencha te hablamos un tema más que importante: ¿qué ocurre cuándo no nos toca el delicioso?
Este es uno de los tantos temas abordados en el estelar programa de Podium Podcast Chile, «Hoy Día Te Toca», conducido por Cata Ramírez y Nicolás Aguirre.
Sequía y abstinencia sexual
El ayuno sexual podría provocar que el riesgo de depresión y la baja en el autoestima. Sin embargo, tal como indicó un estudio del Hospital Royal Infirmary de Edimburgo en el Reino Unido, la abstinencia no tendría consecuencias en algunos casos extremos. Estos ya sean por «motu proprio» como la viudez, enfermedad o elección personal.
¿Es útil para rendir mejor en los deportes?
Pese a que no hay razones empíricas que lo confirmen, el mito de la relación directa entre el sexo y el rendimiento físico en una idea muy arraigada. Es decir, está tan instalada esa idea que puede que funcione por sugestión.
¿Qué ocurre cuándo uno pasa mucho tiempo sin delicioso por elección propia?
Ya sea en mujeres u hombres, los largos periodos sin sexo suelen hacer pensar a uno sobre su «eficacia sexual». No obstante, esto sería solo una batalla piscólogica que se podrían enfrentar con caricias, masajes y besos con el fin de que el acto sexual no se vea afectado.
Aunque según indicó un estudio realizado por psicólogos de la Universidad de Torontó de Canadá, se llegó a una especial conclusión. Esta apunta a que un vínculo erótico-afectivo promueve la dicha personal. Sin embargo, esto último no aumenta debido a la cantidad de coitos u otras prácticas sexuales.
¿De qué depende el deseo?
El deseo sexual se puede ver afectado por muchos factores. Algunos tienen que ver con trastornos hormonales, consumo de medicamentos y efectos de enfermedades crónicas. Otras causas que afectan el deseo pueden ser más complejos y personales anímicos. Incluso, el deseo también puede depender del bienestar económico, de vivienda, etc.
La inapetencia se sexual se puede combatir con pequeños gestos como cuidar el aspecto personal y dejarse llevar por la fantasía.
Asexualidad
Por otro lado, hay que destacar la existencia de la asexualidad. Esta falta de atracción y deseo sea cuál sea el género o sexo no tiene que ver con el odio al sexo, celibato, abstinencia, problemas hormonales, traumas, represiones, egoismo o inmadurez.
Igualmente, es importante señalar que todas las personas asexuales son distintas. Así mismo, algunos se diferencian por su orientación romántica.
En nuestra sociedad tratamos de cuantificar la felicidad y tendemos a pensar que aumentando las cifras de los factores que inciden en ella (más ejercicio, más dinero, más amigos, etcétera) conseguimos acrecentarla. Pero la sexualidad (al igual que otros elementos del bienestar) no funciona de esa manera. Lo que hace dichosas a las personas es la conexión con el otro y el disfrute cotidiano del erotismo, no la cantidad de orgasmos por semana.