La investigación del Caso Tomás Bravo sigue su curso y se siguen revelando nuevas informaciones. Esto después de que la Corte Suprema acogiera el recurso de amparo presentado por la defensa del tío abuelo del menor, Jorge Escobar.
Asimismo, después de la reacción de la madre del niño, se reveló información de un informe secreto del Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar), según consignó BioBioChile. Este fue firmado por la perito forense, Vivian Bustos. Ella es la profesional que ha trabajado en los casos de Nabila Rifo, Fernanda Maciel, Viviana Haeger y Jorge Matute.
La verdadera causa de la muerte del menor
En el mencionado texto, se deja en evidencia que hay «inexperiencia» por parte de los trajadores del Servicio Médico Legal (SML). Asimismo, en este informe se detalla que la muerte del menor no fue por hipotermia en el contexto de inanición y deshidratración.
«Los fundamentos empleados eran inapropiados», afirmó Vivian Bustos, en base a los peritajes que realizaron en España.
Del mismo modo, según lo publicado en el medio señalado, la principal razón de la muerte del niño que se maneja hasta ahora es por asfixia. Esto sería algo a lo que pudo llegar en las primeras diligencias, sin embargo, no se emplearon los «medios técnicos y humanos correctos».
«En la autopsia se emplearon medios tradicionales y básicos de observación, sin incorporar tecnología de mayor precisión (…) y sin contar con profesionales de mayor experiencia», continuan detallando en el informe.
¿El informe se refiere a algún culpable?
No solamente se criticó el trabajo del SML y se afirmó que la muerte pudo ser por asfixia, sino que también se reveló que el menor habría fallecido el mismo día que desapareció. Es decir, el 17 de febrero de 2021, donde el o los involucrados habrían intentado esconder el cuerpo del menor.
En ese mismo contexto, en el informe indicaron que intentaron «encubrir intencionadamente conductas delictivas asociadas a la muerte». Además, informaron que el cuerpo fue movido y «cambiado de lugar por un adulto en al menos dos oportunidades», según rescató Concierto.
No obstante, pese a revelar que el victimario conocía bien el territorio y que tuvo acceso a ese lugar en muchas ocasiones, todavía no se puede llegar a la identidad del mismo. Incluso, también encontraron similtudes en las pisadas encontradas.
«Si bien la existencia de dos marcas figuradas de distintas plantas de calzado ofrece la posibilidad de dos sujetos diferentes que pudieran pisar a T.B.G. es posible considerar que se trate de un único y mismo sujeto que mantiene la posibilidad de aproximarse (al menor)», indican en el escrito, junto con señalar que esto ocurrió en días distintos.
En cuanto a lo complejo que ha sido a llegar a un culpable, esto sería por las pocas pruebas genéticas que existen.