Este domingo después de Tele13 Central se estrenará un nuevo episodio de «Todo Por Ti», el espacio de Canal 13 conducido por Cecilia Bolocco y donde los invitados realizan un especial homenaje a sus madres. En esta ocasión, será la actriz e influencer, Belén Soto, quien dirá presente junto a su madre, Carolina Infante.
En la conversación, ambas mujeres relatarán sus historias de vida. Carolina se referirá a su exesposo y padre de Belén, el locutor Aldo Soto, y su turbulento matrimonio.
«Él era muy celoso. Siempre era ese el problema, yo era 16 años más joven que él. No pude seguir haciendo teleseries porque a él no le gustaba que me diera besos en las teleseries (…) Teníamos una relación con muchas diferencias, de hecho, el día del matrimonio discutimos toda la noche, y yo decía ‘¿Por qué no vi las señales?’. Pero decía que las cosas se iban a resolver», revelará Carolina.
Según confesará, la relación solo fue empeorando y empeorando a través de los años.
«Era agresivo verbalmente, y me llegó a pegar varias veces», indicará, hasta que finalmente se decidió a dejarlo. «La última vez que me agredió me fui a trabajar, a hacer ‘El Tiempo’, después pasé a Carabineros, y ellos me acompañaron a buscar mis cosas y a buscar a mis hijas. Le entregué mi anillo, le entregué las llaves de la casa y me fui con un bulto de ropa», contará la comunicadora.
Lamentablemente, la situación no se quedó ahí. «Él me amenazó, me dijo que por lo que estaba haciendo me iba a destruir, me iba a dejar sin hijas y sin trabajo. Fueron muchos años muy difíciles, de ahí en adelante, en varios sentidos (…) Él hizo harto daño, no solo a mí, a las niñitas también. Se vieron afectadas y eso es lo que yo no quería», concluirá Carolina Infante sobre el hombre, fallecido por un cáncer en 2011.
Belén Soto y su compleja experiencia en un pololeo
Por su parte, Belén también se referirá a su propia relación abusiva, que tuvo a los 15 años, y que dio origen a «No te lo mereces», su primer libro.
«Él era 15 años mayor y me hizo hacer muchas cosas que no puedo contar. Me hizo normalizar muchas cosas que no son normales. Que él podía estar con otras mujeres porque yo no era suficiente, y eso yo lo tenía que aceptar. Yo lo tenía que mantener en secreto, no le podía contar a nadie. Me tenía que alejar de mis amistades, de los hombres, de mi familia, los tenía que poner en contra», relatará
Además, la chiquilla continuará detallando que vivía con un cúmulo de reglas que él le ponía. Entre ellas, Belén Soto no podía contarle a nadie de su relación, no podía tener amigos hombres, tenía que mandarle fotos cuando salía para ver su vestimenta, tenía que llamarla antes de dormir para saber a qué hora llegó a casa y mandarle una foto en la cama para que supiera que iba a dormir.
Para sobrellevar la relación, tuvo que mentirle a toda su familia, especialmente a su mamá.
«Durante los primeros meses me convertí en la mejor mentirosa, él me decía lo que tenía que decir, cómo lo tenía que hacer, cómo lo tenía que disfrazar. Se convierte al final en un Dios y dependes todo lo que haces de lo que dice esa persona (…) Yo era una niña, entonces te lo crees todo, y crees que eso es el amor», sostendrá Belén, quien logró salir de esa relación, pero luego cayó en una profunda depresión sumada a trastornos alimenticios.