El próximo domingo se emitirá un nuevo capítulo del programa de Canal 13, «De Tú a Tú». El espacio conducido por Martín Cárcamo, tendrá como invitada nada más, ni nada menos que a Marlen Olivari.
Emparejada desde hace 14 años con el empresario italiano Luciano Marocchino, y madre de un hijo de 10 años, la ex «chica Morandé» recordará sus orígenes, cuando a mediados de los 90 la entonces actriz empezó a figurar en comerciales y concursos de belleza.
Su aparición en concurso de belleza y la exposición mediática
«La morena en Chile era la negrita. En Chile las protagonistas de todos los comerciales eran rubias de ojos azules y nariz respingada ojalá, piel blanca. Con el éxito que yo tuve en la tele siento que reivindiqué a la mujer morena», explicará Marlen.
Su gran triunfo vino en 1995 cuando se llevó el primer lugar en Miss Hawaiian Tropic. «Me emociona, porque yo siempre fui la negrita de la casa, la crespita. Mucha gente critica los concursos de belleza, pero yo siempre los he apoyado porque para mí fue un gran trampolín que me abrió muchas puertas y me reforzó la autoestima», expresará en «De Tú a Tú».
También se referirá a la época en que el exceso de exposición afectó a su carrera, coincidiendo con su mediático matrimonio y posterior divorcio con su manager, Roberto Dueñas.
Las consecuencias de su mal momento y la relación con Marocchino
«Fue algo que me afectó un montón. No me arrepiento de nada, pero creo que fui muy confiada también. Tuve muchas desilusiones de personas en las que yo confiaba muchísimo, cosas súper feas que no quisiera recordar. Creo que no estaba bien asesorada, el peor mal que puede pasarle a una persona es estar rodeada de mala gente», recordará la ex actriz.
Según revelará, su familia fue la encargada de salvarla en su momento más bajo.
«Me decían que yo no era así, qué me estaba pasando, por qué lloraba todo el día, y se estaban dando cuenta de que el entorno estaba mal», confesará
Asimismo, Marlen Olivari también rememorará: «Un día llegó mi mamá a mi casa y yo la recibí en pijama, porque recién me había divorciado y estuve varios días en pijama. Llega mi mamá y me retó: ‘¿Qué haces acostada? ¿Te vas a pasar la vida llorando acostada? Te quiero decir una cosa: yo no tuve hijas débiles, así que te levantas, te lavas la cara y vuelves a sonreír’. Creo que ha sido la frase más importante de mi vida», confesará.
Acerca de su relación con Marocchino, en tanto, asegurará que para ella la edad nunca ha sido un tema. Tampoco las anteriores relaciones de Luciano, quien es padre de tres hijos con tres mujeres distintas. Incluso, contará, se juntan todos los veranos a conversar en Europa.
«Yo he sido súper buena onda con todos. A mí lo que me gusta es vivir en armonía, que todos riamos y estemos felices», señalará.