Como muchos recordarán, no hace mucho que Jordi Castell llegó al ojo del huracán de la opinión pública. Todo, luego de una polémica aparición que realizó en La Divina Comida, programa de conversación y gastronomía de Chilevisión. En esta, todos acusaron a Jordi Castell de ser racista.
Las acusaciones llegaron porque Jordi habló de su perrita Nina, y del origen de su nombre. El fotógrafo aseguró sobre la adopción de su cachupina que: «los machos eran todos espléndidos, rubios y llegó esta negra desnutrida», refiriéndose a su perrita Nina.
Además, Castell se mandó la frase del oro a continuación, asegurando: «la pobre era fea como la noche oscura. De hecho, por eso, con todo respeto, le puse Nina Simone por negra y fea».
Ahora, y a pesar de que el fotógrafo salió a defenderse de las acusaciones asegurando que «ha tenido amantes negros», el CNTV se querelló en contra del canal que emitió el episodio, Chilevisión. Lo anterior, en relación con los dichos del mismo Jordi Castell.
El CNTV se querella en contra de los comentarios del fotógrafo
Recientemente, el Consejo Nacional de Televisión tomó cartas en el asunto. Todo, por una supuesta infracción al artículo 1° de la Ley N°18.838. Asimismo, la carta enviada por el órgano regulador de la TV abierta, señaló: «Habrían sido proferidas expresiones de carácter presuntamente racista, vulnerando con ello el derecho a la igualdad de trato y no discriminación arbitraria de las personas afrodescendientes».
Asimismo, aseguró que en consecuencia «desconoció la dignidad personal inmanente a ellas como seres humanos, constituyendo todo lo anterior una posible inobservancia del correcto funcionamiento de los servicios de televisión«.
Por otra parte, según reportó Publimetro, la presidenta del CNTV, Faride Zerán agregó: «para ella es muy difícil tomar una decisión, pues considera la libertad de expresión como un valor principal para la vida en democracia”.
Sin embargo, añadió que: «cuando se registran cuestiones tan graves como el racismo a través de afirmaciones reiteradas, como fue en este caso, no se puede defender dicha libertad ante dichos de esa naturaleza».
Por último, cerró: «establecido que la formulación de este cargo no implica prejuzgamiento de culpabilidad, y que se queda a la espera de los descargos de la concesionaria».