Sin duda hay accidentes que llaman la atención; en ocasiones por lo tonto del afectado y en otras, por las consecuencias de estos. Ahora, una triste noticia logra cumplir estas dos condiciones; que destaca la importancia de ser más atento con los alrededores.
Resulta que un joven de 22 años fue víctima de un grotesco accidente; en su visita a la paradisiaca ciudad griega de Mykonos. Todo cuando fue cercenado por las hélices de un helicóptero. Todo, según relataron las autoridades, por tratar de sacarse una selfie cerca de la nave.
Ojo con las selfies
Jack Fenton, de Inglaterra, y sus 3 amigos arrendaron un helicóptero Black Bell 407 para volver a la isla griega. Fue así que fueron transportados en el vehículo aéreo para llegar a la cabaña privada en la que se estaban quedando. De ahí, su plan era partir a Londres.
Sin embargo, Jack volvió hacia donde se encontraba el helicóptero entre medio de los gritos de sus amigos que le rogaban que por favor volviera. Sin embargo, los gritos no fueron suficientes, ya que Fenton terminó perdiendo la vida.
Según reportó TMZ, los que presenciaron el hecho hablaron con el Comité Griego de Accidentes Aéreos; afirmando que el joven tenía su teléfono cerca de su cabeza cuando regresó al helicóptero. Sin embargo, el chiquillo no se habría percatado que las aspas de la aeronave seguían girando; las que terminaron decapitándolo, asesinándolo casi de inmediato.
Aquellos que presenciaron el accidente aseguraron que fue «horrendo»; y que dejó «profundamente traumatizado» al conductor del helicóptero. Sin embargo, a pesar de haber sido un accidente; el piloto fue arrestado, junto a dos técnicos de la aeronave.
La policía local está investigando la posibilidad de que «el joven se dirigiera al helicóptero para tomarse una selfie, motivado por la emoción del momento«.
Los padres del fallecido se encontraban en otro helicóptero cuando ocurrió el accidente; y tuvieron que cancelar el aterrizaje para evitar que los progenitores del angelito tuvieran que ver la grotesca escena.