Muchos recordarán una de las polémicas más grandes de la televisión chilena de los últimos años. Y es que a pesar de que han pasado casi 2 años, los coletazos del «Caso Tijeras» siguen manchando la imagen del ex-animador de Mega, José Miguel Viñuela.
Recordemos que el ahora influencer recortó el cabello del camarógrafo José Miranda sin su consentimiento. Esto generó la salida de Viñuela de la casa televisiva; y además provocó que el productor ejecutivo, Pablo Alvarado, presentara su renuncia.
Ahora, llegan nuevas noticias relacionadas con este caso. Todo porque Miranda decidió llevar el caso a la justicia. Esto porque el camarógrafo habría sido despedido por «necesidades de la empresa» a comienzos de 2022; todo a pocos días de retomar sus funciones en el canal.
El crudo testimonio del camarógrafo
Con respecto a su despido, los abogados de Miranda aseguraron: «Esta desvinculación no es otra cosa que una represalia del canal por la demanda de indemnización de perjuicios interpuesta contra José Miguel Viñuela«.
Por otra parte, los abogados aseguraron que la acción judicial provocó que el CNTV multara a Mega. Todo por «tratar de forma indigna» a su representado. Además, se tomaron el tiempo de explicar las «verdaderas razones» del porqué Miranda fue despedido.
En esa línea, los representantes del camarógrafo agregaron: «Se intenta ocultar las verdaderas razones de desvinculación enmarcadas en las represalias por haber ejercido sus derechos contra el rostro de canal, figura que le generaba réditos no menores al canal».
Finalmente según reportó La Cuarta, los defensores acusaron que a lo largo de los últimos meses, Miranda «experimentó el desprecio e indiferencia de los ejecutivos y jefaturas del canal«; lo que provocó un «menoscabo irreparable».
Recordemos que actualmente José Miguel Viñuela, el principal culpable de todo el conflicto, realiza un programa a través de sus redes sociales; y que con la ayuda de su asistente del hogar, se dedica a destapar cahuines.