En el último tiempo, Naya Fácil ha estado en el centro de la noticia, no solo por una fuerte entrevista en la que refirió a varios aspectos desconocidos de su vida; sino que también por la revelación de su adicción al tusi y que ya estaba en proceso de dejarla.
Frente a este tema es que la chiquilla dejó algo preocupados a sus seguidores de Instagram, al compartir unas historias donde aparecer carreteando tras un largo tiempo. «Nunca había venido a las Terrazas del 14 y aquí estoy ahora, pasé un ratito así que aquí estoy» contó la chiquilla.
Pero la cosa se puso complicada al día siguiente, ya que Naya Fácil reveló en la misma red social que no recordada lo que había pasado. «Chiquillos, yo no sé qué pasó anoche», además de mostrar que tenía una herida en la pierna y no sabía cómo se la hizo.
Por otro lado, la influencer confesó que tuvo medio de sufrir una recaída. «Ayer quería puro hacerle chiquillos, estaba angustiada por hacerle. Llegué a mi casa para saber si le había hecho y no, no le hice».
«Me da miedo a veces estar en estas condiciones y hacerle inconscientemente, como recién me salí de esa we…, tengo que controlarme» continuó con su relato. Tras esto, Naya Fácil publicó unos videos donde sale tomando con unas personas y pidió el registro donde se besa con un chiquillo.
La dura infancia de Naya Fácil
Unos días atrás, la joven dio una entrevista al portal Pousta, donde se confesó sobre su complicada vida, sobre todo su infancia, la que estuvo lejos de ser un cuento de hadas.
«Hubo mucha violencia y maltrato. Me pegaban mucho. Me hice pipí en la cama hasta los 15 años, nunca supe por qué, y por eso me pegaban con el cinturón hasta dejarme tiritando de dolor. Esas son cosas que a veces quisiera olvidar» aseguró.
Además, habló sobre su corto paso por el comercio sexual. «Lo primero que hice fue para redes sociales, y a los 14 conocí el dinero, comencé a agarrarle cariño a eso. Yo no perdí la virginidad por amor, como uno lo ve en las películas».