Audio: Los magníficos pidieron momentos en los que te sientes mágica
Lucho de Chile y Juako Lee alegraron la mañana, y le pidieron a los auditores cosas que los hacen sentir mágicas.
Lucho de Chile y Juako Lee nunca se equivocan al momento de alegrar la mañana de los auditores y ahora tampoco fue la excepción. Le preguntaron a todos los muyayos ¿Qué cosas los hace sentir mágicas? a través de «Los Magnificos», programa regalón que va de lunes a viernes 07.00 a 09.00 horas por Radio Activa.
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Nuestro muyayos tiraron sus momentos que los hacen sentir mágicas. Por ejemplo Luchito dijo que «degustar un chocolate». Mientras que nuestro querido Juako Lee dijo que «llegar a la casa, estirar las patitas arriba del sillón y tomarse cerveza», lo hará sentir mágica.
La ronda la comenzó un auditor que se siente mágica cuando «escucha los domingo a las 8 de la mañana al que vende ‘escoba, escoba… trapero».
«Mágica me siento cuando me llega el correo de la transferencia, que maravilla», dijo un muyayo que se siente feliz cuando le llegan unas luquitas y claro, ¡Como todas y todos nosotros!
Una auditora aseguró que se siente mágica cuando «el marido llega de la faena y juego play station, me encanta».
Otro muyayo que con mucha claridad y velocidad contó su divertido momento que lo hace sentir mágica.
«Es cuando antiguamente me subía a la micro y escuchaba ‘señores pasajeros tengan ustedes muy buenas tardes. Por encargo de importadora universal, paso a ofrecer la siguiente promoción que no puede faltar en la cartera de la dama, en el bolsillo ni en la mochila del estudiante. Tranquila señora, ya paso por su asiento», relató clarito el hilarante auditor a Los magníficos.
Otro ejemplo vino de un muyayo que prácticamente hizo magia. Él se sintió mágica cuando «por la mañana dio el agua de la ducha y no salió el agua caliente. Se acercó al cálifon y dijo ‘prende cálifon c…’ y prendió».
Cuando «el perro explota», «después de 15 años sigo usando la misma talla de pantalón» y cuando el «jefe lo llamó a la oficina y le dijo ‘joven, usted va continuar un año más», fueron otros momentos en que los auditores se sintieron mágicas.