Un escándalo de aquellos se vivió en Colombia cuando una chiquilla no encontró nada mejor que pasearse con poca ropa en las calles para promocionar su Only Fans. Es el caso de Alejandra Torres, mujer que dejó a todos peinados pa’ atrás con su performance.
La chiquilla no encontró nada mejor que salir con su pololo y caminar por las calles de Provenza, en El Poblado con un ligero abrigo y en pura ropa interior.
Patrick Slurick, su acompañante y pinche, iba vestido con un traje negro, elegante y, en realidad, paseaba a su pareja con una cadena, como un amo a su esclava en un típico juego de rol sexual. La escena causó revuelo; la pareja fue duramente criticada por el show que montaron en la calle.
Sin embargo, la situación pasó a mayores ya que llegó hasta la Policía para pararle el show a los tortolitos. Fue ahí cuando la respuesta sobre la causa que tenía a Alejandra en poca ropa dejó a todos impactados; ella solo grababa un video para promocionar su cuenta de Only Fans, donde vende contenido erótico.
«La intención era ver cómo reaccionaba la gente. Detrás de nosotros iba la persona que nos grababa. Era más un experimento. No hicimos nada malo: yo no mostré mis pezones, ni mi vagina. Es una pinta más de las que se van a ver en Halloween», lanzó la chiquilla.
Deportarán al pololo
Y el lío, lejos de terminar, escaló a niveles insospechados. Por ejemplo, el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, pidió que Patrick Slurick, oriundo de Países Bajos, fuera deportado: “Esa persona vino a dañar la imagen de Medellín, a maltratar a las mujeres de Medellín (…) Esa persona no le hace bien a Colombia”.
En medio de los reproches, recuerda Alejandra, a Patrick lo manotearon. Pasaron dos horas de alegato, tiempo en el que la Policía intervino y medió. Después, con una multa impuesta que recayó sobre la mujer, emprendieron el camino a casa. Las horas posteriores han sido traumáticas. Patrick dice que no la ha pasado nada bien.
Y la cosa empeoró cuando se enteraron ayer de la petición del alcalde de deportar al holandés. “Estoy muy preocupado. No volveré a ver a mi novia y eso me tiene muy triste”, dice. Y agrega, desilusionado, que en su país no habría ocurrido nada similar. Incluso, le cuesta imaginar una situación parecida al otro lado del Atlántico.
Pero a Alejandra y a Patrick no les interesa caer en un debate moral. Lo que les preocupa es que el holandés no pueda permanecer en el país y que sea expulsado, dicen, sin haber cometido un delito. “Lo que hicimos no es denigrante. J Balvin, por ejemplo, salió en un video con dos mujeres amarradas como si fueran perras. ¿Es peor lo que hicimos?”, dice la mujer.