Punto G masculino: siete consejos para estimularlo cositos
Hay varios tabú respecto a cómo disfrutan más los hombres en el Punto G, lo cierto es que lo más importante es conocerse y perder el miedo.
Hace una semana en el Martes Hot de nuestra Tencha Salvaje, nos dimos cuenta de los tabú que existen en torno al Punto G Masculino. Pocos se atreven a disfrutarlo, ya que existen prejuicios en torno a este pedacito de placer.
Se sabe que este tema es un tabú para muchos hombres que, cuando alguien los toca en cierto lugar, se convierten en bloques de hielo. Sin embargo, es cierto que para muchos otros, ya sean heterosexuales, homosexuales o bisexuales, la exploración de la próstata sigue siendo una bella aventura.
Según datos de la compañía de productos para el placer HealthyAndActive, las ventas de masajeadores de próstata han aumentado en un 56% en los últimos cinco años, particularmente entre los hombres heterosexuales mayores de 45 años. Se le llama el punto G masculino precisamente porque el orgasmo prostático conduce a un placer extremadamente intenso.
Susan Milstein, educadora sexual y profesora del Departamento de Mejoramiento de la Salud, Ciencias del Ejercicio y Educación Física de Montgomery College en Maryland, explicó que «el ‘punto G masculino’ es la próstata y se encuentra a unas dos pulgadas en el recto hacia el abdomen (…) Se llama así porque contiene muchas terminaciones nerviosas, casi tantas como el clítoris, y por eso quienes estén dispuestos a explorarlo pueden descubrir una nueva esfera de placer», comentó la profesional.
Entonces para disfrutar como corresponde del Punto G masculino, le entregamos algunos consejos para aprender a estimularlo y disfrutar como corresponde de un buen delicioso.
Prepararte
Recuerda que es un masaje que implica un alto nivel de higiene, uñas bien recortadas y algo de lubricante. Esto se aplica a ti, si quieres hacerlo solo, o a la persona que esté contigo.
Ve despacio
Debes empezar con un masaje externo estimulando el perineo, entre los testículos y el ano, zona erógena con la que se recomienda comenzar.
Estimulación interna
Después del masaje externo inserta el dedo en el recto unos centímetros hacia el ombligo y deberías encontrar la próstata. En ese momento, especialmente si es tu primera vez, no te preocupes por hacer quién sabe qué más. Explora esa zona con diferentes niveles de presión y encuentra la parte que te brinde las sensaciones más agradables.
Excitarte
No estamos haciendo un examen de ciencias, preocúpate por elegir el momento adecuado para recibir el masaje y estar estimulado. Tu cuerpo trabajará contigo y todo será más sencillo.
Respirar
La Dra. Uchenna Ossai, consultora sexual, explica que «la respiración es esencial para el juego anal, prostático y pélvico». Si aguantas la respiración tu cuerpo reacciona como si fuera una situación tensa y se contrae, incluso ahí abajo. Mientras que la respiración estimula un estado de relajación. Así que tómate unos segundos para respirar y sentirás que tu cuerpo reacciona de manera diferente.
Masajeador
Hay un par de consejos sobre este tema: el primero es que antes de hacerte con un masajeador de próstata también podrías probar un pequeño tapón trasero vibrador, un juguete intermedio para acostumbrarte a la idea. En cuanto al masajeador, sin embargo, el consejo es elegir uno con una base amplia para no perderla… Ya me entiendes. También es muy importante lubricarlo siempre.
Mejor acompañado
Más allá de que obviamente es más agradable que tu pareja te ayude con este masaje, también es más sencillo a nivel puramente logístico, en el sentido de que no siempre es fácil agacharse, relajarse y hacer todo al mismo tiempo.