Este jueves se vivió un nuevo capítulo de «El Discípulo del Chef», y una confesión de Kenita Larraín dejó a todos los televidentes impactados. Todo surgió a raíz de la eliminación de su amigui, Giuliana Sotela, quién le dijo adiós al espacio.
Cuando la numeróloga dio sus declaraciones en cámara se mostró muy afectada, tanto que rompió en llanto. Lo cierto es que la pena de Kenita no solo era por decirle adiós a su compañera, sino por un tema mucho más delicado.
Según contó minutos más tarde en las clásicas entrevistas fuera de la cocina, hace un par de semanas sufrió otro doloroso episodio: tuvo una pérdida.
La dura confesión
Kenita Larraín decidió romper el silencio y explicar la razón por la que está bastante afectada en el programa. «Obviamente me afecta porque estoy más sensible. Hace un poco más de un mes tuve a toda mi familia hospitalizada, todos graves. Me incluyo. Y además dentro de la clínica me enteré ahí que estaba embrazada y tuve una pérdida», reveló entre lágrimas la modelo.
«Por eso es que lloro, porque tengo que hacer el duelo de ese bebé que no tuve, entonces obviamente que ando más sensible de lo normal», agregó.
Finalmente, Kenita Larraín explicó que participar en el programa de cocina para ella era muy importante, ya que la ayudaba a enfrentar de mejor forma el complicado momento familiar y personal por el que está atravesando. Por eso no ha pensando en dejar la competencia de la cual es participe junto a su querido equipo rojo.
«El estar acá me pone feliz, porque de alguna forma estoy aprendiendo algo que es un arte, que es cocinar. Y estoy muy fascinada por eso, así que eso también me hace comprometerme más emocionalmente, pero claramente estoy pasando un momento difícil», sentenció bastante afectada la numeróloga.