Este domingo Daniela Nicolás participó de la esperada final de Miss Universo, representando a Chile en el certamen de belleza.
Lamentablemente la actriz no salió seleccionada dentro de las 21 finalistas, aun siendo una de las favoritas de la prensa y de los especialistas.
De todas formas, Daniela Nicolás realizó una transmisión en Instagram para agradecer el apoyo de la gente y conversar sobre su experiencia en Miss Universo.
«No sé por dónde empezar a hablar, ha sido un día de emociones desde que me levanté tempranito», expresó la actriz.
Agregando que, «logramos que nuestro país se hiciera conocido a nivel mundial, que todos hablaran de nosotros y eso para mí es un gran avance».
Por otra parte, Daniela Nicolás, manifestó lo importante que era para ella romper con los estereotipos del certamen de belleza a nivel mundial.
«Mi idea era visibilizar las enfermedades autoinmunes para que personas como yo lograran sentirse entendidas y para que, en un futuro, todos los pacientes logren tener tratamiento de la mejor calidad», indicó.
No todo fue miel sobre hojuelas
Si bien Daniela Nicolás se mostró perfecta en cada una de sus apariciones, tuvo que luchar con su enfermedad autoinmune que le jugó una mala pasada.
«Los dolores no me dejaban dormir. Antes de ayer no dormí casi nada por el dolor en mis rodillas, estar más de 12 horas en estos tacos gigantes no me la hicieron fácil, la presión no me la hizo fácil y fue difícil y bien complicado», comentó Daniela.
Incluso contó haber sufrido un pequeño accidente producto de su enfermedad: «Hay veces que mis manos no me funcionan y pierdo fuerza, y me estaba haciendo ondas en el pelo y mi mano no funcionó y me quemé el rostro».
El accidente que comentó Daniela Nicolás ocurrió solo horas antes de que la actriz realizará su entrevista personal.
«Pensaba que la enfermedad no me la hace fácil y empecé a decir: ‘Daniela no llores, todo pasa por algo’. No podía hacer 40 minutos de pasarela porque mi dolor en las rodillas era terrible, no podía entrenar más de 40 minutos, tenía que parar por el dolor de mis caderas».