En un comienzo de la pandemia la posible escasez de consolas no era un problema real para la industria. Sin embargo, ahora lo es. Y es que la nueva generación de consolas confirmó el miedo de varios especialistas.
Según mencionó Festigame, con el paso de los meses se pensó que la cantidad de consolas disponibles a la venta, además de las tarjetas gráficas, iba a ir en aumento. El medio The Guardian mencionó que en un comienzo, la escases se debería a una demora temporal de los suministros. Esto a causa del primer cierre de fábricas cuando el Covid-19 obligó el encierro. Sin embargo, la escases continúa.
No obstante, no es porque la producción no haya retomado un ritmo normal, sino que el incremento en la demanda de consolas, televisores y teléfonos durante la pandemia generaron la necesidad de más chips semiconductores. Estos son indispensables para el funcionamiento de los dispositivos.
Un problema para todos
La situación está afectando a gigantes de la industria como Microsoft, además de celulares y consolas de Sony o Nintendo. De la misma forma, la industria automotriz también se ha visto en problemas.
The Guardian también mencionó que el gigante norteamericano Apple también sucumbió ante la escases y tuvo que retrasar el lanzamiento del «Iphone 12». La compañía de dos billones gasta $58 mil millones anualmente, siendo el mayor comprador de semiconductores a nivel global.
Pero Apple no fue el único. Samsung es el segundo mayor comprador de semiconductores mundial, además de segundo mayor productor de estos. Sin embargo, la crisis también llegó a ellos y tuvieron que retrasar el estreno del próximo smart phone.
«Los chips lo son todo», señala Neil Campling, analista de tecnología y medios. «Hay un nuevo nivel de demanda que no se puede satisfacer, todo el mundo está en crisis y está empeorando», añadió.
