Con velas y globos blancos, estudiantes y apoderados recordaron al joven de 18 años que perdió la vida tras electrocutarse al interior del Colegio Industrial Las Nieves, de Puente Alto.
Byron Díaz murió el primer día de regreso a clases presenciales, mientras participaba de una clase de electrónica y estudiaban de manera práctica la materia de control electrónico.
Fue allí que habría manipulado un motor trifásico, recibiendo una fuerte descarga que le causó la muerte. Apoderados del establecimiento acusaron falta de mantención de las instalaciones, misma tesis que dio cuenta la madre de la víctima, Karen Barraza.
“Se supone que debería haber sido teórico al principio, no haberlo tirado altiro a los leones con maquinarias… estuvieron nueve meses fuera del colegio y altiro lo dejaron con máquinas que a lo mejor no conocían o a lo mejor conocían, pero se les olvidó cómo utilizar”, relató.
Agregó que “recién era el retorno seguro que dijo el ministro de Educación. Ése es el retorno seguro que tuvo mi hijo, me lo entregaron muerto“.
Si bien la investigación de las circunstancias sigue en curso por parte de la Fiscalía Sur y la PDI, la madre adelantó que presentarán acciones legales contra quienes resulten responsables del deceso del joven.