La ansiedad es un trastorno común en nuestra época y afecta a más personas de lo que se cree. En casos graves incluso se vuelve crónica, pero para aquellas personas en las que todavía los episodios no son muy leves y quieren apostar por remedios naturales, Business Insider ha hecho una recopilación con los mejores consejos para reducir la frecuencia de este mal.
Ejercicio regular
Lo primero que se prescribe a la hora de notar síntomas relacionados con el estrés o la ansiedad es el ejercicio. Sobre todo por el impacto positivo que tiene en el estado de ánimo, ya que el cuerpo libera endorfinas, las llamadas «hormonas de la felicidad2. Los expertos aseveran que caminar durante una hora cuatro días a la semana es igual de efectivo que tomar medicación.
Rutina de sueño
En muchos casos, la ansiedad trae consigo los problemas del sueño, y a su vez el hecho de no dormir bien también multiplica las probabilidades de sufrir un nuevo episodio de asniedad. Por ello, es muy importante seguir una rutina del sueño, es decir, establecer una hora fija de irse a dormir y levantarse. Un detalle muy importante es no dormir demasiada siesta o mejor ninguna, ya que en caso contrario se estará contribuyendo a alterar ese ciclo del sueño.
Ejercicios de relajación
La meditación es muy importante para reducir los efectos del estrés y la frecuencia de los episodios. Un estudio de 2019 descubrió que la meditación guiada era mucho más efectiva que la terapia cognitiva conductual a la hora de reducir los síntomas del estrés.
Biorretroalimentación
La biorretroalimentación es el proceso por el cual se puede hacer un seguimiento de las reacciones físicas que tiene el cuerpo a la ansiedad para saber regularlas. Por ejemplo, si el primer síntoma es que el corazón comienza a bombear más rápido de lo normal, se puede aliviar tomando respiraciones profundas y, mientras, monitorear los niveles cardíacos para comprobar que el ejercicio es efectivo y así incorporarlo a esa serie de técnicas que funcionan de cara a reducir la ansiedad.
Comer sano y evitar el alcohol o el tabaco
Una reciente investigación descubrió que una dieta alta en grasas, azúcares y carbohidratos puede aumentar el riesgo de padecer ansiedad en un 25%. Por otro lado, al apostar por las verduras, la fibra o las legumbres, se puede reducir el estrés. Pero además es importante dejar de lado las sustancias tóxicas, como el tabaco, que hace que los vasos sanguíneos se dilaten, favoreciendo que los episodios de ansiedad se produzcan de forma más continuada. De igual modo, el alcohol también es una sustancia muy peligrosa que contribuye a sufrir más estrés. Aunque pueda resultar relajante en un inicio o a corto plazo, a largo plazo es muy destructivo para la salud mental y física.
Tomar magnesio
Se trata de una sustancia mineral imprescindible de cara a reducir los episodios de ansiedad. Así lo demuestra la ciencia: un estudio de 2017 reveló que aquellos que tenían elevados niveles de magnesio en sangre reportaban menores índices de ansiedad o estrés. Es por ello que esta vitamina acaba funcionando casi como un ansiolítico natural. Se puede encontrar en alimentos ricos en clorofila, como las hortalizas o los frutos secos (nueces o almendras), en las legumbres, cereales (arroz integral) y en el maíz blanco.