Delonte West: de jugador multimillonario de la NBA a vivir en la calle como indigente
El exjugador de la NBA, Delonte West, uno de los deportistas más atormentados del último tiempo, ha protagonizado un doloroso descenso a los infiernos
El exjugador de la NBA, Delonte West, uno de los deportistas más atormentados del último tiempo, ha protagonizado un doloroso descenso a los infiernos. El que fuera basquetbolista de los Celtics, Cavaliers y Mavericks se ha vuelto viral por un video donde se le ve siendo pateado en mitad de la calle y posteriormente esposado y fuera de sí intentando aclarar el incidente.
Pero su descenso partió mucho antes. En 2008, West se sinceró públicamente acerca de sus problemas de salud mental. «Siempre en mi vida he tratado de autodestruirme cuando las cosas me iban mejor». En aquel entonces el escolta estadounidense jugaba en los Cleveland Cavaliers junto a un joven LeBron James dispuesto a comerse el mundo.
No tuvo una relación fácil con «The King». Es que dos años más tarde se rumoreó que mantuvo un romance con Gloria James, madre de la estrella actual de los Lakers, lo que le hizo ganarse el apodo «LeBron’s dad» (padre de LeBron). La relación entre ambos se deterioró como la propia vida de Delonte.
Este video ahora viene a corroborar la caída en desgracia del que fuera un multimillonario jugador de la NBA. En las imágenes se ve cómo es apaleado por otro hombre en plena calle y también esposado. Fuera de sí, intentó defenderse. «Yo estaba allí porque quería dormir y él se me acercó y sacó un arma».
I can’t believe this is Delonte West. @NBA please help him. https://t.co/6e5LQbKlUj
— Gabrielle Starr (@gfstarr1) January 21, 2020
This is allegedly Delonte West getting beat up in the middle of the road. Prayers up for this man. pic.twitter.com/EWjQbCJDXz
— Hoop Central (@TheHoopCentral) January 21, 2020
Nacido en Washington D.C. hace 36 años, Delonte estuvo nueve temporadas en la NBA (2004-2012) jugando en los tres importantes equipos antes mencionados, donde llegó a ingresar 16 millones de dólares, una fortuna dilapidada por completo cuando aún estaba en activo. «He visto contratos saltar por la ventana, patrocinios desaparecidos, gastos de juzgados, de abogados y de divorcios. Ves tu cuenta corriente desaparecer lentamente», admitió en 2012.
En su última temporada en la NBA su vida ya era un calvario. Vivía como un indigente en sus primeros meses en los Mavericks porque nadie lo quería como inquilino a causa de sus antecedentes penales. Había sido detenido en el 2009 por posesión de armas y acumulaba muchas infracciones al volante, recoge Marca. Un año más tarde cumplió arresto domiciliario y sólo podía salir de su casa para ir a los partidos. Sin opciones de encontrar un hogar, West admitió haber dormido en el vestuario del equipo o dentro del automóvil en el estacionamiento. Su presente es todavía peor.