Hace unos días comenzó a viralizarse un registro que muestra a un pequeño caracol «jugar» con una zanahoria baby, lo que resultó «tierno» para algunos.
Su dueña que tiene dos ejemplares explicó que «le había ofrecido distintos tipos de comida en las que no se interesaron, pero un día les ofrecí una zanahoria baby y un poco después encontré a Randolph hacer lo que se ve en el video«.
Pero al parecer la realidad es otra y no se trata de un juego ya que el sitio Gizmodo hizo una investigación acerca de la extraña conducta del molusco, hablando con expertos para descubriri la verdad tras el viral.
Sobre el «juego» del animal, el biólogo Menno Schithuizen cree que «los animales suelen jugar para perfeccionar sus habilidades sociales o su propia destreza. En la vida de un caracol, creo que ni el comportamiento social ni la manipulación de objetos son importantes, por lo que no creo que el juego haya evolucionado como parte de su repertorio de comportamento».
Timothy Pearce por su parte dejó en evidencia un posible caso de maltrato animal, ya que «supongo que la persona que grabó el video le dio la vuelta al caracol y puso la zanahoria en su pie, por lo que el caracol está tratando de reptar por su superficie, pero la zanahoria sigue moviéndose como si fuera una especie de cinta de correr».
El molusco tampoco considera a la zanahoria como un alimento, porque en lugar de engullir el vegetal, lo mueve, como si intentara buscar algas, su alimento favorito.
«Obviamente, el caracol no está acostumbrado a una zanahoria. Parece como si palpara esta posible fuente de alimento con su pie, algo que diferentes caracoles con un pie grande hacen con su presa o potencial alimento», deja en claro la investigadora de Paleontología de la Universidad de California, Adiël Klompmaker.