Los matrimonios deberían ser pura felicidad y nada debería arruinarlos pero la cosa no siempre esa así ya que durante una boda en Bélgica quedó la pura patada.
Así es ya que la celebración estuvo a punto de terminar en un situación fatal luego de que uno de los invitados apuñalara al novio durante el festejo.
De acuerdo al Het Laatste Nieuws, el sujeto -que estaba entero cocido comenzó a reclamar porque nadie quería servirle más chela.
Por esta razón, el hombre llevó al novio hasta las afueras de lugar para apuñalarlo en el lado derecho del cuello. Es más, según explicó un portavoz de la fiscalía, Tom Janssens, la víctima se salvó de pura suerte ya que perdió mucha sangre debido al lugar en donde se realizó el corte.
Janssens comentó que al momento de interrogar al agresor, este dijo que le daba lo mismo «si el novio había muerto», justificando su actuar porque le había hecho un regalo de más de 20 euros.
¡Se pasó!
