Los beneficios de la lactancia materna son múltiples, pero mirar a tu bebé mientras lo haces también tiene efectos positivos. Aquí te contamos porqué:
Según los expertos, el amamantar a tus hijos es uno de los momentos en que se genera más complicidad entre la madre y el hijo.
En esta etapa, se comienza a construir el vínculo de apego que continúa en el futuro. Lo principal es desarrollarlo con pequeños detalles como por ejemplo: mirarlo, hacerle cariño, hablarle suavemente, etc.
Este proceso también ayuda en el autoestima y seguridad de los bebés. Los especialistas señalan que lo más importante es que el recién nacido sienta que tiene alguien que cuida de él y que no le va a ser falta.