¿Es posible pensar en una institución tan emblemática como la Teletón más allá de sus clásicos centros de rehabilitación, usando la tecnología para proyectar a la distancia su capacidad de asistencia a personas en situación de discapacidad?
Es lo que pensaron en Claro Chile cuando imaginaron Innovatón 2018. Y en honor a las tradicionales 27 horas televisivas, no podían pensarlo de otra forma: una sesión maratónica –o hackatón, como se les conoce en el mundo tech- donde jóvenes desarrolladores pusieran lo mejor de sí para crear plataformas web o aplicaciones móviles que, además de extender la labor que inició Mario Kreutzberger en 1978, tuvieran su foco en la innovación.
Así fue como este concurso, durante un fin de semana completo, acogió a cerca de 200 participantes, entre desarrolladores, encargados de diseño de interfaz, creadores de modelos de negocios, mentores, jurados y familiares de niños que se atienden en la Fundación Teletón y que apoyaron en la definición de las nuevas ideas.
Desde la madrugada del sábado 24 se dividieron en 16 equipos y, con la guía de mentores, entregaron 48 horas de su tiempo -de corrido y casi sin horas de sueño- en un exigente fin de semana que les impuso el desafío de imaginar la Teletón como un instituto de telerehabilitación, con profesionales capaces de atender a distancia y usuarios que pueden complementar su experiencia de recuperación con sus teléfonos celulares, tablets o notebooks.
El jurado, encabezado por el mismísimo Don Francisco, además de Ximena Casarejos –directora de Fundación Teletón- e importantes personalidades de la transformación digital –como Juan Pablo Cuevas, uno de los fundadores de Cornershop, o el emprendedor Leo Prieto- fue el encargado de elegir, en una durísima competencia que incluyó tres «muertes súbitas» o eliminaciones, a las tres iniciativas ganadoras.
Así, para la noche del domingo, sólo seis iniciativas seguían en pie. Sus participantes, en el límite de su capacidad de vigilia, sacaban entusiasmo de donde fuera. Poco antes del pitch final, era fácil ver afuera del estudio 1 de TVN a concursantes rendidos de cansancio, tirados sobre los cojines del lugar. Pero bastó un llamado que, con clásicos del rock de fondo, hizo correr hasta el escenario a los portavoces de cada equipo para dejar lo mejor de sí en la presentación final. La decisión era difícil y el tiempo que el jurado se tomó en la deliberación lo dejó claro.
Finalmente, casi a la medianoche, salió humo blanco. Los triunfadores fueron «Conectatón», proyecto de gestión de redes de apoyo y contención para pacientes, familiares y equipo médico; «Kinetón», una app que permite seguir ejercicios de recuperación a través de dispositivos móviles; y «Fasty», que permite la rehabilitación remota de los pacientes.
Las tres se llevaron un premio de 2 millones de pesos, además de pasar a una etapa de posible implementación, y de abrir puertas de una Teletón para los próximos 40 años, donde la ayuda a las personas en situación de discapacidad va mucho más allá de un instituto, sino que las acompaña donde quiera que vayan, las mantiene comunicadas y amplía la cobertura a niveles que nunca se imaginaron al principio de todo, en ese ya lejano 1978.
