Las frases cliché no son la mejor solución al momento de afrontar una situación tan complicada.
Al momento de reconocer la falta que han cometido, muchas personas infieles suelen usar frases cliché como justificación, creyendo que de esta manera estarán atenuando el daño a la víctima, pero todo parece indicar que no es la mejor idea.
Al menos así lo plateó la terapeuta estadounidense Michele Weiner-Davis, quien aseguró que la mayoría de las veces que escuchó a sus pacientes decir esto a sus cónyuges, la situación terminó en divorcio, recoge Huffington Post.
«No significó nada para mí» o «fue solo sexo, no tiene nada que ver contigo», son las peores frases que un infiel puede utilizar. «Decir que una infidelidad no tuvo nada que ver con la pareja resulta doloroso, dado que da a entender que la persona no tuvo en cuenta a su pareja al tomar esa decisión. Por tanto, la pareja no se siente querida y piensa que no le importa lo suficiente», explicó la especialista.
Por su parte, la terapeuta especialista en infidelidad, Caroline Madden manifestó que, «decir ‘no significó nada para mí’ es como decir ‘he destrozado tu vida por nada’. A menudo, quien pone los cuernos quiere dar a entender que en ningún momento se planteó dejar a su esposo e hijos por la otra persona. Pero está minimizando la situación; es como decir: ‘Eh, te he puesto los cuernos, pero podría ser peor'», afirmó.
En este sentido, la terapeuta Janis Abrahms, dijo que lo mejor es empatizar con la pareja, reconocer que la conducta fue egoísta y que provocó mucho dolor: «Debes demostrarle que entiendes cómo se siente. Esto quiere decir que te das cuenta de que no hay nada que puedas decir para disminuir su dolor y su furia, salvo escucharle», planteó.
Todas las terapeutas coincidieron en lo mismo y aconsejaron que la persona simplemente admita que es el único responsable del dolor de su pareja y que, una vez superada la situación, sepa perdonarse a sí mismo, para salir adelante.
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