Reducir los automóviles lo más posible e incentivar el uso de la bicicleta es lo que pretende el gobierno de Holanda. Para conseguirlo está negociando pagarle a los trabajadores 0,22 dólares por cada kilómetro que circulen en bicicleta desde su casa al trabajo y además reembolsar el precio de una bicicleta nueva.
Dentro del mismo plan, el gobierno holandés asignó este año más de 100 millones de dólares en el presupuesto para acelerar la construcción de carriles para ciclistas y, sobre todo, para innovar o construir estacionamientos de bicicletas cerca de las estaciones de transporte público.
«Mi ambición es garantizar que las personas puedan ir fácilmente al trabajo, a la escuela, a ver a la familia o a los amigos. La bicicleta contribuye de manera importante a la accesibilidad, la habitabilidad y a la salud. Reduce los atascos y da cabida a las personas que no tengan otra opción», explicó la secretaria de Estado de Infraestructuras y Gestión del Agua de Holanda, Stientje van Veldhoven.
Van Veldhoven agregó que busca «estimular el ciclismo» y atraer viajeros adicionales a los carriles bici: «Quiero que juntos hagamos 3.000 millones de kilómetros más en bicicleta», propuso.
El Ministerio de Infraestructuras y Agua se ha puesto como objetivo sacar de las carreteras a 200.000 conductores y aumentar así el tráfico en bicicleta con el año 2040 como objetivo, consigna Publimetro.
Otra de las medidas que está promoviendo el gobierno holandés, y que están implementando los municipios de forma individual, es la salida de las motos de los carriles de ciclistas y su traslado a las vías públicas y carreteras, con la obligación de usar un casco.
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