Se trata del uruguayo Juan Hohberg, quien sufrió un paro cardíaco luego de la celebración del segundo tanto en semifinales de la Copa el Mundo de 1954.
Con el inicio del Mundial de Rusia han comenzado a reflotar las historias más increíbles de la Copa del Mundo. Una de las que más ha llamado la atención es la protagonizada por el delantero uruguayo Juan Hohberg en Suiza 1954.
Los charrúas se enfrentaban en semifinales ante la poderosa Hungría. Era el debut de Hohberg y no pudo haber sido mejor, ya que marcó dos goles lo que igualaba el partido.
Sin embargo, al parecer la celebración del segundo tanto se fue de las manos, ya que sus compañeros le cayeron arriba en el festejo lo que le provocó un paro cardíaco.
Hohberg debió ser reanimado por el kinesiólogo Carlos Abate, quien le suministró coramina, un vasodilatador que estimula las funciones vasomotoras y respiratorias, según señala Infobae.
Fue ahí cuando revivió y como en esa época no estaba permitido sustituir jugadores, Hohberg debió volver a la cancha luego de estar «clínicamente muerto» , como dice Luciano Wernicke, periodista argentino autor del libro «A Rusia por la gloria», donde recoje insólitas historias de la Copa del Mundo.
Fotos: Captura de video