El resultado es «una verdadera locura» que ocupa parte de su pecho y su cuello.
Al igual que ciento de personas alrededor del mundo, Kenny Ollerenshaw tenía claro que había algo que quería que siempre lo acompañara, por lo que decidió inmortalizarlo en su piel.
Así fue como el hombre llegó con su idea de rendirle un homenaje a su oficio de camionero donde el artista Richard Batey, quien fue el encargado de realizar el tatuaje que el chofer tanto deseaba.
El tatuador no sólo logró dejar feliz a su cliente, sino que también se transformó en todo un fenómeno viral, tomando en cuenta que el resultado fue «una verdadera locura» que abarca todo su pecho y parte del cuello.
Pese a que el camionero quiso hacer gala de su buen humor con el peculiar diseño, lo cierto es que las casi dos millones de personas que se han enterado no pueden ponerse de acuerdo sobre si su idea fue una genialidad o una verdadera idiotez.
¿Tú qué crees? ¡Cuéntanos!
Fotos: Facebook Richard Batey