Asustados por los constantes ruidos que oían durante las noches en su casa, un matrimonio de Florida decidió poner cámaras en la vivienda a la espera de encontrar el origen del misterio, pero al revisar las imágenes lo que descubrieron los dejó aún más sorprendidos .
Como se puede ver en el video, no había actividad paranormal en las madrugadas sino mucha actividad física de su hijo quien iba de un lado a otro, saltando, encendiendo luces y golpeando muebles, como «mono en fiesta».
El pequeño Dylan y protagonista de esta historia, no tiene problemas de salud ni mucho menos es sonámbulo. Este se comporta así porque en el día se le prohíbe hacer este tipo de actividades .