La pobre Jenna Levine llevaba varias noches sin poder dormir. ¿La razón? Sus vecinos estaban métale que suena en el ring de cuatro perillas.
Cuando las ojeras le llegaron al suelo, la Jenna decidió escribirles una carta a sus vecinos para que fueran más silenciosos.
«Hola vecinos. Por favor tengan sexo un poco más bajito. Algunos estamos intentando dormir y no queremos que nos recuerden lo solos que estamos. Siéntanse libres de hacer el amor todo lo que quieran, pero por favor, háganlo sucio con un volumen más bajo. Gracias«, afirmaba la misiva.
Pero lo que la chiquilla no esperaba, era que recibiría una insólita respuesta. “Querida vecina. Sentimos mucho lo que ha pasado, no me di cuenta de lo ruidosa que estaba siendo. A veces tener sexo ruidoso está bien, pero es a costa tuya y por eso pido perdón. Espero que esto no haya pasado muy a menudo y gracias por tu divertida carta. Intentaré hacerlo sucio a nivel mucho más bajito y no te preocupes, no estarás sola para siempre. La persona correcta vendrá cuando tenga que llegar. Yo estuve soltera 18 años. Lo siento. Habitación 338”