La idea fue para promocionar «Terminator: Genesis» -se estrena el 10 de julio- y, también, apoyar el programa After- School ALL –Star, iniciativa que promueve que los broca cochis de menores ingresos vayan al colegio.
El actor se puso el famoso traje y se metió en el Museo Madame Tussauds de Los Ángeles. Entonces ahí vino la sorpresa: la gente que fue al edificio no cachó que la estatua de cera tenía vida y más de un susto se llevaron cuando posaron para la selfie. Las reacciones de los visitantes se grabaron en un video que invita a hacer donaciones para apoyar el programa educativo.