La cosa sucedió así: Randy Brown, quien vio como iban a rescatar al can, decidió filmar la hazaña con su cámara. El bombero se acercó cuidadosamente donde estaba el perro y, con la intención de sacarlo cuanto antes, también se tiró al agua congelada, pero logró su objetivo: el animal logró salir ileso. El héroe, quien terminó con más frío que el “Chuña”, tampoco registró lesiones.