El padre de este jovencito le consiguió un trabajo, pero él lo dejó a los tres meses por parecerle “muy aburrido”. Luego se llevó a su polola -también sin pega- a vivir con él, exigiendo que también la también la atendieran…
Y bueno, los tatitas lo denunciaron y el juez falló a su favor: no tenían por qué hacerse cargo de mantener un adulto, sin embargo, Xu Qing no acató la sentencia y se negó a abandonar el hogar o conseguir un trabajo. Una historia sin fin parece….