Es sabido que los fumadores hacen esfuerzos a veces desesperados para dejar el tabaco, y muchas veces no lo logran;
Este hombre ha estado 26 años fumando dos cajetillas diarias y, para dejar este vicio ha diseñado este casco, motivado principalmente, porque su padre murió de un cáncer de pulmón y aunque al principio a su familia le parecía ridícula esta medida, rápido entendieron que era la única forma de Ibrahim de dejar de fumar, a la fuerza, contra sus incontrolables deseos de dar una pitada a un cigarro y finalmente se ha transformado en un proceso familiar.
Y ustedes radioactivos fumadores, llegarían a este extremo?