Todo partió cuando ella era estudiante en la universidad y veía lo cansados que andaban sus compañeros que no vivían cerca, y que por para salvar la situación ponían sillas juntas a lo largo, para poder dormir durante la noche en la universidad.
«Por ejemplo este escritorio puede ser usado para tomar una siesta, o para cuando no hay mucho espacio para dormir durante horas muertas«, explicó.
Aunque por el momento esto sólo es un prototipo,seguro en el momento que salga a la venta, será un éxito, porque está claro que muchos quieren «este sueño hecho realidad».
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