Es tan fanático por los juegos online, que no celebra el año nuevo ni tampoco navidad. Haga frío o calor no sale a la calle y su gran preocupación es su bien más preciado, un joystick de diamantes que no suelta por nada del mundo. Todos quienes lo ven cada día, cuentan que siempre está concentrado en el juego y eso tiene entre sus consecuencias, que no se haga el tiempo para ir al peluquero y luce una champa de pelo bastante larga y despreocupada, al igual que su ropa.
De las pocas cosas que se saben de él, fue gracias a un periodista de un diario quiso entrevistarlo, y que durante su encuentro, practicamente no sacó la vista del monitor ni un momento y fue bastante poco comunicativo. “Jugar me da unos 320 dólares mientras que el alquiler del equipo me cuesta unos 80 dólares mensuales”, fue una de las pocas frases que esbozó.
Según quienes lo conocen, Li meng debería visitar a un doctor, y lo hacen apelando a que desde el año 2008, la legislación de China califica la adicción a internet como un trastorno mental, que se ha hecho cada vez más común en China. En 2010 la revista Wired publicó un reportaje sobre un campamento para tratar este problema entre los jóvenes del país asiático, donde un 80 por ciento va camino a seguir los pasos de Meng.
Y ustedes, se pasarían el día frente al computador?… Ni se les ocurra, porque ya se los hemos dicho en Radioactiva… Sólo se vive una vez!